El padre Thierry de Roucy, fundador del movimiento Puntos Corazón, estuvo en Chile a principios de abril. Empezó su estadía con una visita a los cinco misioneros del Punto Corazón de Valparaíso: Candela, Manon, Alejandra, Natan y Bruno. Ellos actualmente están en búsqueda de otra casa para vivir la misión.
De vuelta a la casa Vianney de Santiago, el padre Thierry y el padre Lorenzo con nuestro diácono Eduardo celebraron una misa acompañados por algunos amigos de la Universidad. Luego, tuvimos un tiempo para compartir, durante el cual, Verena preguntó al padre Thierry cómo ser una presencia de Cristo en el mundo de hoy. Padre Thierry contestó recordando la importancia de afirmar un “yo” verdadero e invitando a tener un juicio sobre cada cosa para no dejarse llevar por la corriente de tal o cual moda. También algunos preguntaron acerca de la crisis actual en la Iglesia en Chile y a eso el padre Thierry apuntó sobre el actitud cristiana para atravesar esta crisis a partir de dos palabras claves que son «exigencia» y «esperanza» para no caer en el desaliento y la desconfianza.
Esta visita a Chile terminó con un retiro para los voluntarios de Valparaíso y los consagrados de Santiago en la casa de unos amigos de Machalí. En esta ocasión, el padre Thierry nos introdujo a la vida de la hermanita Magdalena de Jesús (fundadora de la Fraternidad de las hermanitas de Jesús). El padre Thierry nos presentó el lugar preferido por ella, tanto por el espíritu de infancia como por el asombro frente al inmenso amor de Dios hacia todos los hombres: Belén. Allí, la hermanita encontraba un deseo grande de vivir este misterio de la encarnación uniéndose profundamente a toda la humanidad.
Antes de partir para Nueva York, el padre Thierry nos confió su asombro por Chile, por todos los encuentros que tuvo y por la hermosa humanidad de los chilenos. Sus últimas palabras fueron de mucho ánimo para seguir plenamente la misión.